Cada tlamanalli es una obra única de creación, donde tu inspiración te guiará para colocar los diferentes objetos en su lugar adecuado. Permite que tu intuición te conduzca y fluya con la energía del momento. Deja que tu corazón y tu espíritu se conecten con los elementos y sus significados profundos.
A continuación, te ofrecemos una selección de imágenes de tlamanallis y dibujos inspiradores. Estas representaciones te servirán como guía y referencia, ayudándote a visualizar y estructurar tu propio tlamanalli.
Cada objeto se integra armoniosamente en el altar, creando un espacio sagrado lleno de significado y propósito.
La creatividad y la conexión espiritual son tus mejores aliados en este proceso. Confía en tu capacidad para crear un tlamanalli que potencie la ceremonia y honre a los espíritus y energías que invocas.
Materiales para la confección de un Tlamanalli
Idealmente, tendrás una serie de objetos que puedes utilizar en cualquier ceremonia. Estos pueden ser más genéricos, como los que la mayoría de las personas que se dedican a la ayuda emocional o espiritual conocen por sus propiedades, o personales, que son significativos para ti y te gusta tener cerca cuando realizas eventos que te abren y llenan el corazón.
Utiliza objetos naturales
Dependiendo de la época del año, puedes encontrar diferentes elementos naturales. En otoño/invierno, es fácil encontrar piñas, nueces, bayas, etc. Aquí hay algunas sugerencias:
- Conchitas de mar: De diversos tipos y tamaños.
- Minerales: Cuarzos rosa, obsidianas, ágatas.
- Velas: Diferentes tamaños y colores.
- Piedras: Diferentes tamaños y colores.
- Plumas: De diferentes aves y tamaños.
- Inciensos: Olores suaves que no saquen mucho humo.
- Figuritas: Representaciones de tus guías, deidades, etc.
- Cartas oráculo: Cartas inspiradoras, no adivinatorias.
- Frutos Secos con Cáscara: piñas, nueces, castañas.
- Frutas: Manzanas, mandarinas, mangos.
- Hojas y Vegetación: Hojas, ramas.
Flores para el Tlamanalli
En toda ceremonia están presentes las flores naturales pues elevan la frecuencia del lugar. El color depende de tu preferencia o de la estación del año. No uses flores secas o de tela, ya que al no ser algo vivo, su frecuencia vibratoria es bajísima y no ayudan a subir la energía del lugar. Aquí hay algunas recomendaciones:
- Blancas: Para ceremonias más espirituales, representan pureza, paz y armonía.
- Rojas: Ideales para celebrar el amor, la pasión o la fuerza.
- Amarillas: Perfectas para atraer alegría, felicidad y prosperidad.
- Azules: Indicadas para buscar paz interior, serenidad y claridad mental.
- Rosadas: Relacionadas con el amor incondicional, la compasión y la ternura.
- Moradas: Para ceremonias de transformación y conexión espiritual.
Conclusión
Crear un tlamanalli es una experiencia profundamente personal y espiritual. Permite que tu intuición y creatividad guíen la disposición de los objetos, creando un altar que refleje tu intención y energía únicas.
Este espacio sagrado no solo potencia la ceremonia del cacao, sino que también honra la sabiduría y las tradiciones de los pueblos originarios.
